Por: Equipo de Comunicaciones de la IC.
Como todas las semanas, la Subsecretaria del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género, Bernarda Pérez (militante de la Izquierda Ciudadana) publicó una nueva columna-video en Radio Bío Bío. El tema que, en esta ocasión, abordó la autoridad de Gobierno es el rol de las mujeres jefas de hogar y las estadísticas de empleo para este grupo de la sociedad.
Bernarda Pérez sostuvo que, dentro de los cambios que se han experimentado en los últimos 50 años, hay uno concreto: el aumento de las mujeres como jefas de hogar. En este sentido, explicó que, de acuerdo, a los datos de la Casen 2013, las mujeres jefas de hogar son un 37,9% que corresponde a un total de 2 millones de hogares, siendo en el área urbana aún más alta la cifra con un 39,6%, mientras que en las localidades rurales disminuye a un 25,6%.
“Las jefas de hogar son mujeres económicamente activas, que tienen responsabilidades familiares y son el principal sustento económico del hogar, e incluye, además, a mujeres que viven al interior del hogar, que tienen un jefe o jefa distinto a ella, pero que aportan, económicamente, para mantener cargas familiares”, aseguró la Subsecretaria del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género.
Según planteó Bernarda Pérez, en su nueva columna, es que una de las preocupaciones que esta situación, en general, presenta, es que “se estima que un 20,7% se encuentra en los niveles de pobreza y pobreza extrema. Esto, sumado al difícil rol de ser las principales o únicas responsables del cuidado de lo doméstico, de adultos mayores, de niñas y niños, de personas enfermas, entre otras cosas”. Agregó que “el desafío de conciliar la vida familiar y laboral se torna, entonces, complejo”.
Políticas de apoyo
Para Bernarda Pérez, estas cifras “demuestran que la desigualdad económica, política y social sigue afectando de manera persistente a las mujeres. Este Gobierno hace suya esa necesidad y, precisamente, se encuentra diseñando un sistema nacional de cuidados, donde las personas, el Estado, desde el diseño e implementación de políticas públicas y el sector privado, se hagan co-responsables en tareas reproductivas de cuidado”.
Al mismo tiempo, hizo hincapié en que dentro del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género, “contamos con un Programa para Mujeres Jefas de Hogar y este 2016 aumentó su cobertura de 230 a 250 comunas. En 2015, participaron 25.251 mujeres en 230 comunas del país -54% recibió formación para el empleo dependiente y un 43% para levantar iniciativas económicas independientes-. Un total de 2.148 mujeres lograron un trabajo con contrato el año pasado”.
Pérez explicó que el Programa para Mujeres Jefas de Hogar permite acceder a una red de apoyo laboral, en el que dependiendo del perfil y de la disponibilidad de cupos existentes en las comunas, pueden recibir capacitación en el área de oficios, nivelación de estudios, cuidado infantil, alfabetización digital y atención odontológica. “Se busca que las mujeres fortalezcan su autonomía económica, a través de empleos de carácter dependiente o independiente y, por sobre todo, de calidad. Para esto, es indudable que se requiere contar con políticas complementarias como, por ejemplo, el Programa Más Capaz que habilitará, laboralmente, a 300 mil mujeres durante este Gobierno, de las cuales, 40 mil recibirán apoyo para iniciar un emprendimiento”.
Asimismo, destacó que en la línea de establecer el trabajo independiente se han generado redes y existen alianzas que buscan fortalecer y desarrollar las capacidades emprendedoras de las mujeres para contribuir a la sostenibilidad de sus negocios y su potencial para el crecimiento. “Hemos realizado capacitaciones en diversos ámbitos y hemos propiciado asociación con la empresa privada y la entrega de herramientas tecnológicas (postulación a subsidios y capitales Semilla para emprendimientos turísticos o empresarias innovadoras, por ejemplo)”. Añadió que “es en esta área y en esta senda de apoyo y cooperación que lograremos que más mujeres puedan ingresar al mercado laboral, cuestión que tanto necesita nuestra economía para crecer, para ser más competitivos y, sobre todo, para ser un país más justo, donde las mujeres puedan lograr una mayor autonomía económica”.